Soy una mujer estrecha, me dijo
con una seguridad y firmeza que contrastaba con su fina y pequeña figura. A mí
la palabra ya me tiró para atrás, no digamos el concepto. No puedo con eso de
la estrechez. Lo relaciono con la falta de espacio, de tiempo, de lo que sea,
pero falta de algo. Prosiguió su historia narrándome sus peripecias sexuales:
siempre me ha costado que me la metan. Así, tan delicada ella. Hoy vamos a hablar del vaginismo.
Vaginismo: “respuesta condicionada
que probablemente procede de la asociación de dolor o temor con los intentos o
incluso fantasías de penetración vaginal” Helen. S. Kaplan. La mujer no controla
directamente o “desea” que la constricción vaginal ocurra, es una respuesta
pélvica involuntaria.
Las causas pueden ser de origen físico,
psicológico o ambas.
Causas fisiológicas:
infecciones vaginales, endometriosis, enfermedades inflamatorias de la pelvis,
tumores, secuelas tras una cirugía ginecológica…
Causas psicológicas: trauma
después de un parto, aversión al sexo por una experiencia traumática vivida,
sentimiento de culpa debido a una educación estricta, ignorancia de la anatomía,
miedo a un posible embarazo, rechazo a su pareja…
Según su aparición, el vaginismo
puede ser primario o secundario.
Primario: cuando una mujer
nunca ha logrado la penetración durante las relaciones sexuales.
Secundario: aparece tras
un periodo de vida sexual sin problemas de penetración.
Antes de pasar al tratamiento de
la disfunción, me gustaría aclarar un punto de vital importancia: Las mujeres que
padecen vaginismo pueden alcanzar orgasmos, ya que no existe afectación de su
respuesta sexual ni del deseo.
Tratamiento del vaginismo: ¡¡¡INFORMACIÓN!!!
Información sobre la anatomía. Información sobre la respuesta sexual del cuerpo.
Información sobre los aspectos psicológicos que generaron y contribuyen a
mantener el vaginismo.
Información sobre la anatomía
Principio básico: conócete a ti
misma. Coge un espejo y mírate tu clítoris, tus labios, tu entrada vaginal. Autoexplórate.
Información sobre la respuesta
sexual.
Principio básico: eliminar la
evitación fóbica de la penetración vaginal. Nos vamos a ayudar con los
ejercicios de Kegel (tensar y relajar) para tener un mayor control sobre los
músculos vaginales. Segundo paso ir introduciendo un dedo, luego dos,
explorando circularmente el canal vaginal. Una vez superado los pasos
anteriores se puede utilizar dilatador, vibrador, dildos…La última fase seria realizar dichos
ejercicios con tu pareja.
Es importante que para la
ejecución de este “entrenamiento” consigas estar relajada, yo diría más:
excitada. Concéntrate en sensaciones placenteras, fantasea, usa lubricante.
Información sobre los aspectos
psicológicos
Principio básico: es fundamental
la terapia individual. Es primordial para comprender y tratar los aspectos que
la han llevado a desarrollar dicha disfunción. Cada mujer tiene su historial y
este es intransferible.
Quedamos para la siguiente sesión.
Antes de levantarse me miró fijamente y me espetó: “querida, ayúdame a abrirme
porque a mí me gusta el bambú”. Yo le acompañé con cara de póker hasta la
puerta. Con-Sex.
No hay comentarios:
Publicar un comentario