domingo, 30 de noviembre de 2014

¿Por qué nos negamos al Sexo?

No soporto el viento. Me revuelve. Es como cuando no tengo sexo. El buen sexo saca lo mejor de mí. El psiquiatra Charles Nemeroff afirma que “el contacto físico y la intimidad reducen considerablemente el estrés y la ansiedad”. Tenemos hasta 2000 terminaciones nerviosas en cada yema de los dedos. Si está, es por algo. Entonces ¿por qué nos negamos al sexo? Partamos de la premisa que no tocaré el tema de l@s asexuad@s o la aversión al sexo. Habló de cuando hay rechazo al sexo como expresión de comunicación, de deseo, de fuente de placer, de compartir…
En mi experiencia como sexóloga puedo decir que no hay un caso igual a otro pero si hay un hilo  común: no volver a sufrir. Frente a la posibilidad de que se pueda repetir esa experiencia optan por la negación de los sentidos. Algunos lo viven sin dramatismo, incluso con humor, todo bañado con un deje de “sinsabor”.
Sentada en la bicicleta...
Ella: ¿Cómo vas de amores?
Yo: Fatal, hace tres meses que corté con el de…. Y me subo por las paredes. ¿Y tú chiquilla, después de tu ex qué se cuenta?
Ella: Nada.
Yo: ¡¡NADA!! ¡Si fue hace cuatro años!
Ella: No me interesa el tema.
Yo: (Miro al infinito y subo la resistencia de la bicicleta)
“El deseo forma parte integrante de la respuesta sexual humana”. Masters y Johnson. ¿Dónde va ese deseo? ¿Dónde lo enterramos? Si la sexualidad forma parte de la naturaleza humana ¿por qué nos negamos a ella? Es natural que deba existir un espacio de recuperación, sobre todo para reparar el sistema. Pero pasado ese intervalo (totalmente variable dependiendo de la situación y persona) ya no hay razón para no tener un contacto físico acompañado de “la relación” que sea. Pocas cosas son tan placenteras como el buen sexo.  Si en ti persiste el miedo, disgusto, expectativas irreales, anticipación al fracaso, es que tienes la necesidad de tenerlo todo controlado, y ese control sabes que se pierde cuando es cosa de dos.
El proceso de evolución sentimental es en realidad un aprendizaje complejo. Vivir es complejo ¿o no?
No tengas miedo al abandono, al rechazo, a perder tu libertad o identidad. Haz frente a la situación conociendo y asumiendo lo que sucede y por qué sucede. Valórate a ti mism@,conoce tus herramientas. Te dará seguridad.
“El cerebro humano es un fenómeno continuo. Se construye como resultado de las relaciones del contexto cultural, y ante todo, de la experiencia afectivas de nuestras vidas” Neurólogo Boris Cyrulmik.

Y hasta aquí el post de hoy porque tengo prisa. Quedé con unas amigas para salir y quizás con un poco de suerte siga construyendo mi sexo… Perdón, mi cerebro... ¿O  lo mismo es?  Tema para otro post ;-) Con-Sex

domingo, 23 de noviembre de 2014

Hay que ser exigentes.

Necesito sexo. Necesito abrazo. Necesito boca. Necesito labio. Necesito lengua. Necesito tu palabra. Necesito mi aire. Necesito tu hueco. Necesito tus ojos. Necesito que estés dentro. Necesito vivir fuera.  Necesito el blanco y negro y la tarde del sillón. Necesito ahogar el grito en la almohada. Necesito bailar a tú lado. Necesito tu café de media tarde. Necesito el moño al escribirte. Necesito que sea fácil. Necesito chupar tus dedos mojados en amaretto. Necesito que no seas un mito. Necesito que mi piel sepa a ti. Necesito beberte. Necesito ponerte cara. Necesito un final feliz. Necesito que me hundas con tu peso en la cama. Necesito abrirme y no ser corriente cayendo. Necesito tus manos en mis pechos. Necesito viajarte. Necesito que me excites. Necesito ser tu porno. Necesito no ser pérdida sino ganancia. Necesito ser tu calendario. Necesito no releerte. Necesito permitirme ser así…

Yo a cambio me doy entera, sin partes ni fisuras, roca o arena…depende de ti…

¿Y tú qué necesitas? Haz tu lista… lo mereces. Con-Sex

domingo, 16 de noviembre de 2014

Lo que haría por ti y ni por ti haría…en el sexo.

El otro día salí por la noche y me encuentro con la siguiente pregunta de casi un desconocido: ¿y tú qué harías por amor? Yo le contesté alguna chorrada, no estaba para filosofar, además no me ponía. Pero pensé en todas “aquellas cosas” que he hecho por amor…. Hoy vamos a hablar de lo que haría por ti y ni por ti haría…en el sexo.
Es curioso lo que puede llegar hacer una persona cuando está a gusto con alguien. En mi caso, por ejemplo: dejarse tocar los pies. Sin embargo hay otras que ni por asomo podrían aceptar. En mi caso el “estilo sadomaso”, ya que por circunstancias personales cualquier atisbo de violencia, aun siendo un juego, no consigue excitarme (ver post del 7 de Septiembre).Y ahí andamos debatiéndonos entre disfrutar o no. Porque de eso se trata, de gozar, no de hacer favores.
A continuación les transmito una serie de vivencias en las que un@ se puede encontrar. De ti, solamente de ti, depende realizarlas o no…
Anilingus o beso negro: consiste en la estimulación del ano con la lengua. El ano está lleno de terminaciones nerviosas por lo que un simple roce de lengua puede despertar sensaciones muy placenteras. Sobra decir que lo único necesario para esta actividad es una cuidadosa higiene. Explora, si estás comod@, adelante…
BDSM: BD (Bondage y Dominación) y SM (sadomasoquismo) .Los participantes se relacionan con un traspaso de poderes donde uno ejerce el rol de dominante o activo, y otra parte de sumiso o pasivo. Generalmente el dominante es el que influye dolor, azota, humilla al sumiso. Sobra decir que lo único necesario para esta actividad es el respeto mutuo. Explora, si estás comod@, adelante.
Pornografía: hablamos de todo material con contenido de imágenes o reproducciones videográficas que representan actos sexuales o actos eróticos cuyo objeto es provocar la excitación sexual. Es obvio que no se trata de sentarte con las palomitas y tu pareja a verla entera. Quizás como fondo de escena, un susurro que te acompaña, imágenes que pueden estimular. Sobra decir que lo único necesario es que tú elijas “ver”. Explora, si estás comod@, adelante.
Urolagía o lluvia dorada: consiste que la persona que toma el rol pasivo recibe la orina del otr@. En esta práctica se involucran juegos recíprocos de poder y sumisión.  Aquí radica su placer. Sobra decir que es una práctica voluntaria en donde debe existir una gran conexión. Explora, si estás comod@, adelante…
Podría seguir detallando encuentros eróticos que en algún momento de tu vida puede surgir: juego de roles, facesitting, hacer un collar de perlas…pero eso sería otro post.
Resumiendo: cada circunstancias tiene sus porqués, cada aventura tiene su “suéltame el pelo”, cada historia tiene su guion, pero la claqueta de acción solo depende de ti…Silencio…Se rueda

Ella sutilmente se puso de cuclillas, le miró a los ojos, abrió la boca…y supo que era la protagonista. Con-Sex

domingo, 9 de noviembre de 2014

¿Realmente, importa cuántos?

Paseo por La Laguna, ciudad universitaria donde estudié. Es inevitable pensar en viejos amores, en noches de locura, de risas y sexo… Y me hago “la pregunta” ¿cuántos hombres han pasado por mi vida? Les puedo decir que no son todos los que están, ni están todos los que son. Vamos, que algunos ni pena ni gloria, y otros, se me han escapado sin catarlos. ¿Se creían que les iba a dar una cifra? Están bonit@s. Cosa absurda donde las haya, el dar cifras, me refiero. El otro día sin ir más lejos, una de mis pacientes de 37 años, me contaba preocupada que su pareja le había reprochado que hubiese estado con 10. Hay cosas que uno se debe guardar, sencillamente porque no es significativo, no dice nada de la persona. Da igual con quien, cuantos, como. Hoy vamos a hablar de si realmente importa el número.
Partamos de un hecho básico, que si me conocen ya saben por dónde van los tiros. Es absolutamente indiferente que seas hombre o mujer. El número de amantes que eliges no está condicionado por tu género. Va ligado a circunstancias de la vida, a tu libido, a tu educación, al entorno social…Son tanto los factores como infinito los motivos. Por ejemplo, hay personas con una libido altísima pero han encontrado a su pareja en el número tres, pues genial. Otr@s sin embargo “las cosas del querer” le han llevado por otros derroteros y acumulan parejas sexuales. Aquí no  hay fórmulas. Aquí lo importante es que lo hayas decidido tú en plenas facultades (entiéndase lo de plenas facultades también en noches de juerga, porque el sentido común nunca hay que perderlo).
Otra creencia que pulula por ahí, es que cuantas más parejas has tenido mejor amante eres. ¡Gran error! Yo he tenido “casi vírgenes” cuyo sexo ha sido delicatesen. El buen amante es ganas de complacer, ganas de escuchar, ganas de hacer. El buen amante es ganas de ti.
Ahora para ser honesta tengo que confesar una cosa: yo aprendo más en las relaciones largas. Ese aquí te pillo aquí te mato no va conmigo, tiene su cosa, pero no hay nada como hacerlo a tu cuerpo, a tus maneras (Vaaale y yo a las de él, no soy tan heavy).
Tampoco los tiros van por: hay que besar a 15 ranas hasta encontrar tu príncipe. Fuerte imbecilidad. Si te lías con alguien pensando en la posibilidad que sea “tu hombre”(o mujer), te darás más de un tortazo. Palabra de terapeuta. Vete con alguien por su inteligencia, simpatía, belleza, altura, atención, sensualidad ... porque es verde y me dio la gana y punto.
Resumiendo el número no importa, lo que cuenta es:
                           saber que usted existe
                           uno se siente vivo
                           y cuando digo esto
                           quiero decir contar
                           aunque sea hasta dos
                         aunque sea hasta cinco… Benedetti


¡VIVE! Así de sencillo. Con-Sex.

domingo, 2 de noviembre de 2014

Viaje con nosotros y disfrute…

Hoy les invito a un viaje a su interior. Noooo, no vamos de análisis personal psicológico. Vamos a conocer nuestras “partes íntimas“. Siempre me ha gustado esa expresión: intima de intimidad o ¿para mi nada más? Curioso...Hoy vamos a hablar de los genitales.
El aparato genital masculino lo compone una parte interna y otra externa. La interna lo forman: testículos, epidídimo, conductos deferentes, vesículas seminales, conducto eyaculador, próstata, glándulas Cowper. La externa: escroto y pene. Y hasta aquí la clase de anatomía. Interesados en más pinchar Wikipedia.
 Afrontemos el pene con preguntas, que es lo que a mí me pone. Las preguntas me refiero. Bueno, lo otro también, pero no viene al caso ahora.
¿El pene es un músculo? No. Ni tampoco tiene hueso. Es tejido eréctil: dos cuerpos cavernosos y un cuerpo esponjoso.
¿Por qué se produce erección? No me refiero a porque algo te excita y él “obediente” responde. Me refiero a la dilatación de las arterias que suministran sangre al pene.
¿Cuál es la parte más sensible del pene? En principio el glande, ya que su superficie está llena de inervaciones, sobre todo por bordes y frenillo. Dicha sensibilidad hay que tenerla en cuenta para su “gestión”. Lo mucho puede dañar.
¿Cómo se mide un pene? Se realiza con el pene erecto y se mide por encima del tronco del pene, apoyando la regla contra la sínfisis del pubis.
¿Se puede agrandar un pene? Solo es aconsejable la cirugía cuando hay un trastorno (micropene). Se realiza con una inyección de biomateriales o cirugía del ligamento suspensorio. Todo lo demás (pastillas, parches, cremas…) no se ha demostrado su eficacia.
¿Es natural que el pene tenga curvatura? Sí. Puede apuntar hacia arriba, abajo, a la derecha…depende de la tensión del ligamento superior. Cuando la desviación es muy grande se trata de una enfermedad llamada Peyronie.
Podría estar contestando a preguntas toda una vida. No exagero, es un tema apasionante. Pero me planto aquí por que toca los genitales femeninos.
Los genitales femeninos están formados por una parte interna (vagina, útero, ovarios y trompas de Falopio) y una externa denominada vulva (clítoris, labios mayores y menores, montes de Venus y vestíbulo vulvar) Para más anatomía pinchen en bla,bla…
Queridas mujeres dejen de leer y cojan un espejo. Sí, no es broma. Espero….No hay dos vulvas iguales, como no hay dos caras iguales. Sencillo. Varía el tamaño del clítoris, labios mayores más pequeños que los labios menores, incluso puede llegar a no existir, toda una gama de colores… Lo dicho: es única. Mi vulva es divina. Así lo siento, así lo expreso.
Sigamos avanzando. Tema vagina. Es un conducto fibromuscular “elástico”. Es decir, se adapta a cualquier miembro. Nota aclaratoria: por estar lubricada no significa que podamos ser penetradas. Para ello, lo necesario es estar relajada. Esa es la palabra clave: relaxing.
Otra cuestión que me suelen plantear, y curiosamente más los hombres que las mujeres, es nuestro querido punto G. Existe. No es un punto, es un “área erógena”. Su forma sobresale y es rugosa al tacto. Se encuentra entre los 2.5 a 7.5 cm de la pared frontal de la vagina. Para estimularlo es conveniente (yo diría que necesario) que la mujer esté excitada.
Para finalizar el rey del Mambo, el clítoris, por su capacidad para gozar. A TODAS nos genera placer su uso y disfrute. La cuestión es saberlo manejar. Aquí, igual que con el espejo.  Aprende a llevarlo para luego enseñarlo a tu pareja. Es zona eréctil, por lo tanto, se llena de sangre y se hincha. Cuando no se llega al orgasmo se produce una vasocongestion que puede permanecer en los genitales y causar dolor. Consejo, échalo para afuera, quedarte con las ganas es tontería.
Se me quedan muchas cuestiones por resolver pero no me quiero extender. Lo breve si bueno, dos veces bueno. Nunca me gustó este dicho…Nada como pasar la tarde…leyendo. Con- Sex

PD: toda pregunta que deseen realizar solo tienen que participar, anímate a colaborar.