domingo, 4 de enero de 2015

La sexualidad a través de la línea cronológica.

Tengo que preparar para la radio un programa sobre la edad de las mujeres y su sexualidad. Complejo. Muy complejo, porque yo con 50 años, he vivido la mayor decepción de mi vida con un hombre, y compruebo por otra parte, que una mujer de 15 años puede sentir un gran amor disfrutando plenamente de su sexualidad. Entonces ¿Cómo poner etiquetas a las emociones? ¿Cómo vivir tu sexualidad según una edad? Lo intentaré. Vamos a hablar del sexo a través de una línea cronológica. Y para no hacerlo muy teórico y espeso les hablaré desde mi adolescencia, mi juventud, mi madurez…todos mis “mi” (ella se lo guisa, ella se lo come).
De los 11 a los 20
En esta fase hay gran variabilidad en el desarrollo sexual: nos encontramos chic@s de aspectos completamente aniñados con otr@s más desarrollad@s (vello, cambio de voz, senos, torpeza motora…Lo relacionado con el sexo cobra una enorme importancia.
Mi adolescencia fue sencillamente horrorosa. Todos los cambios mencionados se produjeron en mi de forma tardía y en dos meses, por lo cual sufrí el síndrome  Hulk (estallé toda la ropa y estallé a mi madre con mi rebeldía).
En definitiva: está etapa puede ser muy gratificante si vives tu sexualidad de forma placentera, o por el contrario, muy frustrante si es fuente de conflictos.
Pasamos a los 20 años
El sexo continúa siendo una prioridad pero las cosas están más calmadas. Ya no hay tanta presión al haber tenido experiencias. Nos encontramos con una sexualidad más estable en donde los afectos hacía la pareja van tomando forma. Se inicia las primeras relaciones “serias” que dan pie a descubrirte en nuevas facetas.
En mi veintena surgió mi primer amor, siete años duró y aprendí a demandar lo que necesitaba para gozar.
En definitiva: está etapa es la  de la comunicación, la de valorar tu cuerpo, la de mostrarte y conocerte.
Pasamos a los 30
Con el transcurrir de los años vas adquiriendo ciertas habilidades y práctica. Sabes lo que te gusta. Adquieres una confianza que te da libertad para vivir intensamente la sexualidad ¿o no?
Yo viví dos embarazos, dos crianzas y un divorcio. Mi sexualidad se convirtió en un desahogo de tanto estrés.
En definitiva: está etapa es la del  asentamiento, el de la anticoncepción, abandonarse al placer, el de los ejercicios de Kegel.
Pasamos a los 40
De acuerdo con los especialistas, es la edad del goce sexual pleno, la mejor edad para vivir el sexo a lo grande. La realidad suele ser otra. Aparece una disminución en la frecuencia de las relaciones, ya sea porque caes en la rutina con tu pareja o por las presiones de crianza, laborales…El poco tiempo libre da cierta pereza sexual y puede llevarte al círculo del “no deseo”.
Yo resurgí de las cenizas, entré en otra dimensión, la del yo, yo y yo…Era la dueña de mi placer. Descubrí que el sexo era lo mío. Me hice sexóloga.
En definitiva: está etapa la construyes tú, es la de los cambios, la de las dudas y decisiones…o la de la estabilidad y permanencia compartida. El sexo dependerá de los caminos elegidos.
Pasamos a los 50
Es el otro periodo del gran cambio hormonal. Se manifiesta el climaterio que puede durar de 2 a 6 años (su periodo de inicio varía en cada mujer). Se suceden escalonadamente una serie de hechos (perdida de la regla, sequedad vaginal, cambios de humor, aumento de peso…) que te hacen replantearte tu sexualidad.
Para mi está siendo el mejor momento de mi vida, en donde he crecido a través del deseo del otro. Han surgido pasiones y grandes descubrimientos. No hay derrota en mi recreo sexual.
En definitiva: está etapa es la de la superación, la de vivir tu sexualidad sin ninguna amenaza porque ya has superado muchos obstáculos y esto te hace más fuerte ¿o no? ….Cualquier trastorno que se prolongue en el tiempo acudir a un especialista.

Me despido de ustedes  aquí sentada en posición de loto, con la certeza que habrá un hombre que valore mi sexo, mi ser, mi esencia….todos necesitamos ser queridos, y eso no sabe ni de edades ni de líneas rectas. Con-Sex

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